Bolsa: 10 claves de un boom
La Bolsa superó un récord en la semana, pero luego volvió a caer. Los fundamentos económicos de la suba y los peligros que hay de una recaída.
Oscar Martínez
omartinez@clarin.com
Lentamente al principio, y cada vez con mayor velocidad y consistencia, la Bolsa se convirtió en el objeto del deseo de inversores de todo tipo y calibre. Y a diferencia de otros momentos de "euforia bursátil", esta vez parece haber condimentos que la alejan de la timba de cualquier posible burbuja especulativa para acercarla —con las precauciones del caso—, a una variante interesante para arriesgar capital. Por eso, a pesar de algún traspié transitorio, sopla viento de cola en 25 de Mayo y Sarmiento.
Entre los fundamentos económicos de la racha que llevó al principal indicador de la Bolsa, el índice Merval, a duplicar prácticamente su valor en los últimos 10 meses, se pueden anotar:
- Mejora en el nivel de actividad económica, con un crecimiento estimado del PBI superior al 7%.
- Recuperación de la rentabilidad y del valor de las empresas.
- Estabilidad financiera, con depósitos en alza y tasas bajando.
- El dólar "planchado" por la oferta de los exportadores.
- Se cumplen los principales puntos del acuerdo con el FMI.
- Mejora del clima regional y la lenta vuelta de capitales externos.
- Proceso de reestructuración (y en algunos casos de repago) de la deuda externa de las empresas.
- Medidos en dólares, los precios de las acciones están lejos de sus valores históricos.
- Consolidación política del Gobierno nacional.
El conjunto de todos estos fenómenos provocan una situación de recuperación de la confianza en los inversores. La consecuencia: "No hay una burbuja y no se puede decir que se acabó el boom de la Bolsa. Con las tasas muy bajas y el dólar poco pedido, no hay alternativas mejores. Puede subir más un día y bajar otros, pero tendría que pasar algo muy serio para volver a los números de principios de año", explicó Rafael Ber, de la consultora Argentine Research.
"El mercado bursátil refleja la mayor confianza de los agentes en las condiciones macroeconómicas. Esto se refleja en que muchos utilizan los dólares del colchón o de las cajas de seguridad a la inversión en activos de riesgo", sostiene a su tiempo Néstor De Cesare, de la sociedad de Bolsa Allaria Ledesma & Cía.
Pronóstico con paraguas
Y el futuro parece bastante despejado. "No es irracional que la Bolsa siga subiendo. Según nuestras estimaciones, y siendo un poco conservadores, es posible llegar a un Merval de 980 puntos en el mediano plazo", dijo Ber.
"En el corto plazo puede bajar por tomas de ganancias, pero confiamos en un Merval de 1.000 puntos como mínimo para los próximos 12 meses, lo que otorga un potencial de suba de entre el 10 y el 15%", dijo De Cesare.
El panorama, aunque alentador, no deja de mostar algunos nubarrones en el horizonte.
Para De Cesare, "los riesgos de un escenario como aquél son, básicamente, un cambio relevante en las condiciones económicas y financieras a nivel internacional (por ejemplo, que baje el precio del petróleo y la soja) y una crisis política a nivel local que perjudique las perspectivas de recuperación de la actividad". Pocos creen que pueda suceder, pero siempre debe considerarse
