Presión impositiva, a bajo nivel
Muchos empresarios argentinos se quejan de la supuestamente elevada presión tributaria que padecen. Otros dicen que está bien lo que pagan, pero que sus competidores evaden.
Lo cierto es que la carga impositiva de la Argentina no está, como se piensa, entre las mayores del mundo, sino que es superada por la de los países desarrollados y por algunos en vías de desarrollo. Sólo es menor en ciertas naciones emergentes.
Los ingresos tributarios del Estado previstos en el presupuesto 2004, sumados a los gravámenes provinciales y municipales, representan un 23,5% del producto bruto interno (PBI), según un estudio de la economista Laura Malajovich, del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec). En cambio, esa relación en Suecia supone un 52% del PBI; en Francia, un 40%; en el Reino Unido, un 37,2%; en España, un 34,2%, y en Estados Unidos, un 29 por ciento.