Ex empresarios de medios arman fondo de u$s 500 millones para agroindustria

Julio Gutiérrez y César Báez, ex hombres fuertes del fondo Hicks, juntaron u$s 100 millones en la Argentina. Ahora van por u$s 400 millones en Europa y EE.UU.

18deMayode2007a las07:09

Vientos de cola empujan al sector agropecuario argentino: disfruta de altos precios internacionales de los commodities, recoge récords de cosecha año tras año, cuenta con la vuelta al negocio de inversores extranjeros, que tras su éxodo a partir de los años ’60 retornaron con millonarias inversiones en la compra de frigoríficos (lideradas por la brasileña Friboi y Cargill) y espera sacar rédito del prometido boom de los biocombustibles. Esos son algunos de los motivos por los cuales el argentino Julio Gutiérrez, responsable del crecimiento de Cablevisión en los años ‘90, y el dominicano César Báez, uno de los ex hombres fuertes del fondo norteamericano Hicks, Muse, Tate & Furst (hoy HM Capital Partners) y del extinto grupo CEI, decidieron encarar un ambicioso plan centrado en las tierras argentinas.

Ambos ejecutivos lideran la conformación de un fondo de inversión destinado a encarar desembolsos en el sector agroindustrial. El dinero se destinará a crear un proyecto que permita explotar toda la cadena de valor del sector agropecuario en forma integral. Eso contempla desde la compra de campos hasta la adquisición de frigoríficos –se iniciaron sondeos en complejos industriales del interior del país– y la instalación de una planta de biocombustibles. Ese es uno de los proyectos más avanzados, que demandará una inversión de u$s 57 millones y estará emplazado en una ciudad portuaria.

"Nuestra intención es crear un fondo para investigar alternativas de inversión en el sector agroindustrial. No sólo en plantas o en tierras, sino en toda la cadena", explica Gutiérrez, que hoy preside la fundación Campo en Acción, una organización que ganó cartel luego de la organización del congreso de biocombustibles que se realizó la semana pasada y contó con la participación del ex vicepresidente norteamericano Al Gore. "Queremos participar en todos los eslabones, desde la utilización de las tierras hasta la comercialización de productos a través de frigoríficos y plantas de biocombustibles. Creemos que es propicio porque el ambiente mundial es apto para el negocio alimenticio y las nuevas energías", completa.