La tensión política puede más y el mercado se adentra en zona de pánico
La incertidumbre copó la plaza bursátil y ni siquiera las acciones ligadas al precio del petróleo pudieron servir de refugio. Los bonos también tuvieron su castigo.
Muchos se fueron temprano. Desde las 16 hs., sendas concentraciones –la del Gobierno y la del campo– le amarrocaron la posibilidad al mercado local de contar con el grueso de los operadores, que salieron disparados de sus oficinas para no perder las combi.
Ni falta hacía.
Desde las primeras horas, el humor estuvo claro. Perdón, el “mal humor” estuvo claro. Así que “saltearse” la última hora de operaciones no fue una decisión difícil. El cóctel de los imperecederos temores por la crisis financiera internacional reforzadas por las declaraciones de Ben Bernanke, la salud de la economía de EE.UU., pero sobre todo la crisis nerviosa declarada del mercado local derivada de un nuevo capítulo en la discusión entre Gobierno y campo, le dieron un nuevo empujoncito a los valores cotizantes. “Vimos mucha aversión a los activos locales y hoy ya no sólo se piensa en las retenciones, sino también en las cuentas públicas y en el incremento del gasto y la inflación”, señaló Santiago López Alfaro, de Delphos.
Lo dicho: el pesimismo se ha hecho carne y es seguro que no terminará una vez que el Senado discuta hoy las retenciones.
En la línea final, los niveles de precios ya son los de 2007. Hablamos de los 1.878 puntos del Merval y de la caída de 2,24%.