El comercio con China pasó a ser deficitario

Había superávit desde 2001.

09deAgostode2008a las08:22

Ejércitos de hombres de rasgos orientales unidos por una coordinación perfecta al son de un solo tempo De no ser por los trajes luminosos y los estruendos de la pirotecnia iluminando el cielo del Estadio Olímpico de Beijing, la imagen de ayer podría asimilarse al ritmo de los trabajadores industriales, en cualquier rincón del territorio chino. La capacidad del gigante para deslumbrar en el espectáculo y mostrarle su apertura al mundo no es menor en el ámbito de la economía. Y esto se comprueba en los efectos sobre la balanza comercial con la Argentina, que en el primer semestre del año sufrió un déficit sin precedente en los últimos siete años.

El rojo de los primero seis meses de 2008 fue de US$ 482 millones, según el Instituto de Estadísticas y Censo (Indec), y revierte un privilegio que ostentaba la Argentina por ser uno de los pocos países del mundo que le vendía a China más de lo que le compraba. El balance resultó deficitario al aumentar las importaciones desde el gigante asiático un 66% sobre igual período de 2007, con un monto de 3324 millones, mientras que las exportaciones se expandieron en menor medida: un 33%, con un total de 2842 millones. Las compras de insumos -el rubro de importación más importante- sumaron 1080 millones, es decir, un 105% más que en el primer semestre de 2007. Ya en 2007 se temía que se perdiera la ventaja sobre China conseguida en 2001, pero finalmente salió airosa con un pequeño superávit de 253 millones.