En dos días, Wall Street tuvo su mayor rally desde 1987, pero no alcanza para cambiar la tendencia

Los analistas aún no se juegan a decir que lo peor ya pasó, pero reconocen que existe un clima más distendido. Todavía hay temores por otros sectores de la economía que están en problemas, como el automotriz. El Merval y los bonos locales acompañaron y subieron hasta 9 %, pero el volumen operado sigue muy bajo. Brasil, entretanto, cerró 9,4% arriba.

25deNoviembrede2008a las07:47

¿Mercados en el mejor de los mundos? No tanto. El rescate al Citigroup, dicen los operadores de Wall Street, permite avizorar una gran semana (corta, porque el jueves no hay bolsa por celebrarse Acción de Gracias en EE.UU. y el viernes –si bien se opera– el volumen será ínfimo) y quizás un buen fin de año (en diciembre los fondos buscarán terminar arriba en sus posiciones para que año sea más decoroso). Más allá de eso, la incertidumbre se mantiene. Los sectores complicados con la crisis siguen apareciendo y la recesión es un hecho del cual se desconoce su duración. Pero, en el cortísimo plazo, nadie le quita lo bailado al mundo financiero. Ayer, gracias al bailout al Citi, el flamante equipo económico de Obama, el plan del electo presidente de EE.UU. para estimular a la economía y demás, Wall Street subió entre 5% y 6,5% según los casos. De hecho, el rally del viernes pasado y el de ayer consagró a los índices americanos a su mayor suba (de dos días) desde 1987. Como era obvio, el beneplácito se contagió al resto de los mercados del mundo. En América latina, Brasil fue el referente: ganó 9,4%, la mayor suba diaria del año.