El campo llegará con poca fuerza al Congreso
Tras la pelea con el Gobierno de 2008, los ruralistas auguran sumar mayor protagonismo de la mano de un puñado de dirigentes que accedan a bancas en la renovación parlamentaria. La prioridad es modificar las retenciones.
La participación de dirigentes rurales en las listas de aspirantes a puestos nacionales en el Congreso es sólo una sombra de la oposición que se vislumbraba durante los peores momentos del conflicto por las retenciones móviles que dominó la agenda nacional en 2008. Si bien a principios de año, la dirigencia se entusiasmaba con contar con el 30% en los listados nacionales, finalmente quedaron apenas una decena de candidatos del campo compiten por un escaño en las legislativas del 28 junio.
Con esa realidad, quedará limitada la representación sectorial en el nuevo Parlamento, que sin embargo tendrá por primera vez en su historia referentes del gremialismo rural activo. Más allá del número final que acceda al Parlamento, los ruralistas seguirán apuntando sus esfuerzos allí para, como prioridad, modificar el esquema de retenciones a las exportaciones.
Luego de la decisión de la mesa de enlace de que ninguno de los presidentes de las 4 entidades sea parte de la contienda, la combativa Federación Agraria (FAA) logró posicionar a la mayor cantidad de candidatos. Y la conjunción Coalición Cívica-UCR es la fuerza política que aglutinó en sus listas a la mayor cantidad de hombres y mujeres del campo.