El "picudo negro" amenaza a la soja y no hay cómo controlarlo
El escaso conocimiento biológico de las especies del coleóptero detectado en el NOA, dificulta su estudio en la Eeaoc. Sin embargo, se establecen patrones de emergencia para que la plaga no avance.
En el Noroeste Argentino (NOA) el complejo de picudos constituye un serio problema para el cultivo de la soja, debido a su alto potencial de daño, al escaso conocimiento biológico de las especies involucradas y por sus complicados hábitos de vida, lo que dificulta su estudio y control, señaló a LA GACETA Rural la licenciada María Guillermina Socías, de la Sección Zoología Agrícolas de la Eeaoc.
El "Picudo Negro" (Rhyssomatus subtilis, Fiedler 1937), coleóptero de la familia de los "Curculionidae" es una plaga emergente en el cultivo de soja para el NOA. Fue detectada por primera vez en la Argentina atacando brotes tiernos en el estado vegetativo y vainas en el estado reproductivo del cultivo, en las zonas de La Fragua y Nueva Esperanza (Santiago del Estero), Rosario de la Frontera (Salta), y en 7 de Abril (Tucumán), durante las últimas cuatro campañas de soja.
El adulto mide aproximadamente 5 mm de longitud y presenta el cuerpo de forma oval, de color pardo oscuro a negro. La cabeza es pequeña, curvada y densamente punteada, lo mismo que el tórax.