Con un dólar quieto y plazos fijo en aumento, las tasas en pesos empiezan a aflojar
Un tipo de cambio congelado en $ 3,85 y un mayor apetito por el riesgo, tornan atractivo a instrumentos en moneda local. La mayor demanda, hunde el interés de estos activos.
El relax tiene lo suyo. El veranito financiero trajo consigo que grandes y pequeños ahorristas sacan su partido y hacen negocios. El tipo de cambio permanece estable desde hace dos semanas en torno a los $ 3,85 –el viernes, sin intervención del Banco Central (BCRA), terminó en ese valor–. Una mayor calma tanto en el plano internacional como local, impulsa a los inversores a tomar más riesgo. De esta manera, en el último mes la demanda de dólares no sólo se disipó, si no que creció el apetito de los inversores, residentes y extranjeros, por activos nominados en moneda local.