Fertilización en soja
Si el suelo tiene menos de 12 ppm de fósforo disponible, es probable que el cultivo sufra una deficiencia moderada y el rendimiento disminuya más de un 5% respecto de una situación con buena disponibilidad. Si el suelo tiene menos de 8 ppm, la deficiencia será más severa y el rendimiento del cultivo caerá en más de un 10% comparado con un cultivo fertilizado.
A partir de la información obtenida en la red de ensayos del proyecto Fertilizar-INTA, de la que formé parte junto con otros investigadores, establecimos recomendaciones para la fertilización de la soja. Estos ensayos en la región pampeana, que datan de 2001/2002, los realizan permanentemente los investigadores en la región y proveen la base para tener en cuenta a la hora de seguir una estrategia de fertilización para este cultivo y maximizar su rendimiento.
Así, considero que para nitrógeno lo recomendable es garantizar un adecuado establecimiento de la nodulación y su fijación simbiótica, lo que se logra a través de la inoculación de la semilla con cepas de rizobios. En el caso del fósforo, el análisis de suelo permite predecir la respuesta del cultivo a la fertilización.