Efecto Bicentenario: el Central pasará a tener 44% de su activo en bonos
Sumando el bono que recibió por el pago al FMI y el que se colocará ahora, la autoridad monetaria contará con u$s 16.400 millones en títulos a diez años sin cotización y que no pueden ser vendidos en el mercado financiero.
El impacto del Fondo del Bicentenario que anunció Amado Boudou no es limitado para el Banco Central. Si bien no hay riesgo en cuanto al poder de fuego para controlar el tipo de cambio o en la cobertura de los pesos emitidos, lo cierto es que el activo del BCRA quedará deteriorado. Primero, no es lo mismo tener activos líquidos como los dólares contantes y sonantes que bonos del Gobierno que carecen de cotización y son intransferibles. No es la primera vez que pasa: en 2005 cuando se anunció el pago al FMI, también Néstor Kirchner les colocó un título por u$s 9.800 millones al Central. Ahora, el monto asciende a u$s 6.600 millones, que serán retribuidos en la misma forma. O sea, un bono a 10 años con un valor de mercado desconocido (porque no cotiza) que estará en las arcas de la autoridad monetaria durante una década. Es más, según Finsoport, después de consumarse la entrega del bono por esta última movida oficial, el BCRA tendrá el 44% de su activo explicado por títulos públicos. Para peor, la evolución es más que desfavorable. Antes de “bono FMI”, el peso de la deuda local era del 5% y luego del pago cash al organismo se disparó la tenencia del Central en títulos al 27%. La autoridad monetaria pasará a tener u$s 16.400 millones en títulos intransferibles a 10 años que paga todo el capital al vencimiento. Nadie en el mercado hubiera comprado un bono de estas características.