Mayor atención por fuertes cambios en el 2014
La devaluación, una inflación acelerada, la suba de tasas y los gastos obligan a las empresas agropecuarias a estar encima de las variables financieras
La devaluación del peso, la aceleración de la inflación, tasas más altas por un giro ortodoxo del Gobierno en política monetaria y el contexto de incertidumbre por el futuro de la economía obligan a los productores a levantar la guardia una vez más. Y a pensar de lleno a qué variables ponerles la lupa. Un escenario donde, al margen de lo productivo en la campaña, el control financiero y las estrategias de gestión en torno de gastos e inversiones deben saltar al primer plano.
Parece ser un momento para el escritorio, como resumió Ricardo Negri (h), responsable del área de Investigación y Desarrollo de Aacrea. Escritorio no significa pasárselas sentado en él, sino bastante más. "Se trata de pensar mucho. Creo que es un año de escritorio, porque lo que tengo que hacer es ir calzando resultados y no perder el control de los gastos para que no se me disparen con respecto a mi moneda de cambio", explicó Negri (h).
Juan Manuel Garzón, economista del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral), de la Fundación Mediterránea, no tiene dudas de que en el actual contexto pasa a tener una mayor relevancia una cuidadosa planificación financiera tranqueras adentro.
"Todo indica que el financiamiento será más caro y más escaso en este 2014. Como el financiamiento será costoso, el productor deberá evaluar muy bien las opciones de inversión, el capital de trabajo que requerirá y ser muy estricto en el seguimiento de los compromisos asumidos en materia de cobranzas y pagos", apuntó Garzón.
Y agregó: "Deberá tener en cuenta el rendimiento de los distintos activos que posee o desea adquirir y minimizar la tenencia de aquellos que no pagan un retorno suficiente. Un ejemplo sencillo de entender: el efectivo en caja no paga un retorno, por lo que tener una disponibilidad excesiva de caja (por una mala planificación financiera) puede significar una pérdida económica importante en un contexto de elevadas tasas de interés".
Cada decisión que se tome deberá tener medido su costo, ya sea que se contrate un servicio, se venda o se vaya pensando en la próxima siembra.
"Un buen manejo financiero de la empresa será tan importante como un buen manejo productivo y tecnológico. Deberá tenerse muy en claro los costos y exigencias financieras de cada una de las decisiones", indicó Garzón.