En el campo o en la cocina: el maní es una buena alternativa

Pasada una época de pérdidas y bajos rindes, los productores maniceros apuestan al mercado interno.

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12deJuliode2018a las08:29

“Cosecharás lo que siembras” es una frase que no pudo aplicarse este año a la producción de maní que atravesó una temporada complicada debido al déficit hídrico, entre otros tantos factores, arrojando un rinde de un 46 por ciento menor al año 2017. Sin embargo, desde la Cámara Argentina del Maní (CAM) están desarrollando políticas para fomentar el consumo en el mercado interno y brindar financiamiento a los productores maniceros.

Tal como lo describió Javier Martinetto, presidente de la CAM: “El impacto de la sequía fue terrible, casi tres meses sin nada lluvia y encima en abril hubo un temporal que no ha servido para la recolección de los frutos.La campaña 2017/8 ha sido para el olvido. El clima de esta cosecha ha sido un factor crucial, yo que estoy hace tiempo en el negocio no recuerdo una situación similar. No es una cuestión estructural sino coyuntural”.

En el caso particular del maní, Martinetto calificó a la situación como “un combo negativo perfecto porque hemos sembrado con costos altos. Como el año anterior habíamos tenido zonas inundadas donde se siembra maní, habían salido muchas hectáreas del circuito de alquileres, lo que presionó un poco la demanda sobre el resto de la tierra e hizo que los alquileres subieran, con lo cual el costo de implantación del cultivo fue muy alto con rindes bajos”.

Asimismo, agregó causas externas: “El mercado nos ha encontrado con una situación que el resto de los países que venden maní han tenido muy buena cosecha, con lo cual ha habido una sobreoferta mundial, que va a impactar en la cosecha próxima.

Los últimos dos o tres años han sido complicados desde el punto de vista climático y el presidente de la Cámara vaticinó que: “Este año el sector va a perder 200 millones de dólares”.