Cómo impacta la desaceleración china en las compras de carne

Desde mediados de noviembre China ha comenzado a dar señales de un cambio de timón en su política de abastecimiento externo.

Exportación argentina de carne bovina.

Exportación argentina de carne bovina.

27deEnerode2020a las14:41

De cara a un nuevo ciclo comercial, resulta ineludible contemplar el efecto que generará en la industria la desaceleración –al menos transitoria- de las compras chinas. Desde mediados de noviembre China ha comenzado a dar señales de un cambio de timón en su política de abastecimiento externo. Este cambio, lejos de ser fortuito, responde a una clara estrategia del gobierno para intentar contener el proceso inflacionario que ha comenzado a gestarse como consecuencia de la voracidad comercial exhibida por los principales importadores ante la crisis sanitaria, exacerbada en los últimos meses por el advenimiento del Año Nuevo Lunar, que representa el momento de mayor consumo de carnes para toda la región. 

Son cuatro los ejes principales de la estrategia  conducida por el gobierno chino para navegar esta crisis. En primer lugar, la toma de acciones concretas para agilizar las habilitaciones de plantas proveedoras en todo el mundo. Bajo esta iniciativa se estima que llegó a habilitar unas 177 nuevas plantas en 22 países. Paralelamente, la decisión de habilitar el ingreso de carne desde Hong Kong, tradicionalmente considerado el ‘canal gris’ por el cual se filtran enormes volúmenes de carne de países vecinos a China sin la debida habilitación. Como tercer eje, la liberación de miles de toneladas carne de cerdo proveniente de almacenes estatales, reservados precisamente para atender casos de emergencia alimentaria. Por último, y quizás el más contundente, lo representa la determinación de cortar abruptamente la financiación otorgada a empresas importadoras sobre nuevos contratos de compra lo que conllevó a una paralización casi total del comercio así como a la renegociación de una gran parte de los contratos preexistentes.

Hasta acá, lo conocido. El mercado vive un total desconcierto aunque persiste la confianza respecto de la necesidad de su demanda. Más allá de estas medidas, no cabe duda de que China seguirá comprando dado que aún mantiene un importante déficit de carne que demandará al menos un par de años resolver. En cuanto a los tiempos de la reanudación de la actividad comercial, las opiniones de los principales analistas se encuentran divididas entre quienes estiman que este freno comercial no se prolongaría más allá de febrero-marzo y entre aquellos, menos optimistas, que ven a esta situación sosteniéndose hasta mediados de año.

Impacto en nuestro país

Pensando en la situación local, Argentina está trabajando con un nivel de oferta muy elevado. La faena del último año resultó un 3,3% superior a la de un año atrás (3.130 mil toneladas) y poco hay para suponer que ese nivel de procesamiento vaya a caer significativamente en lo inmediato. Si bien muchas plantas frigoríficas han bajado su nivel de actividad durante enero, la mayoría continúa faenando a buen ritmo, optando por un redireccionamiento de la mercadería a otros destinos, incluido el mercado doméstico. De acuerdo a los últimos datos de exportación recientemente publicados, durante el mes de diciembre se registraron ventas al exterior por 88.840 toneladas equivalentes carcasa, acumulando en el año unas 840 mil toneladas, 49,3% más que lo exportado en 2018.