El FMI repasó los cuatro hechos detrás de la inflación de alimentos

Con un gráfico demostró la poca relación que existe entre el precio que reciben los productores y la inflación que impacta en los consumidores

El FMI repasó los cuatro hechos detrás de la inflación de alimentos
05deJuliode2021a las12:00

El Fondo Montario Internacional (FMI) repasó los factores detrás de la inflación global de alimentos: "Si los precios finalmente vuelven a subir, es probable que haya diferencias considerables entre países. Debido a varios factores, es probable que los consumidores de los mercados emergentes y las economías en desarrollo que aún luchan con los efectos de la pandemia sientan más el efecto", advierten.

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Los cuatro hechos detrás de la inflación de los alimentos

Hecho #1: La inflación comenzó a aumentar antes de la pandemia.

El trabajo publicado en el Blog del FMI, elaborado por Christian Bogmans, Andrea Pescatori y  Ervin Prifti, advierte que la inflación de los alimentos en el mundo comenzó en 2018, cuando China se vio afectada por un brote de peste porcina africana que impactó sobre el stock de cerdos del gigante asiático: "Esto hizo que los precios de la carne de cerdo en China alcanzaran un máximo histórico a mediados de 2019, lo que generó un efecto dominó en los precios de la carne de cerdo y otras proteínas animales en muchas regiones del mundo".

Esto se vio agravado por la introducción de aranceles de importación chinos sobre la carne de cerdo y la soja estadounidenses durante la disputa comercial entre Estados Unidos y China.

Hecho #2: Bloqueo e interrupciones de la cadena de suministro.

Al comienzo de la pandemia de Covid, las interrupciones de la cadena de suministro de alimentos, el cambio de los patrones de consumo de alimentos (como salir a cenar) a los supermercados minoristas y la acumulación de existencias (junto con una fuerte apreciación del dólar estadounidense) hicieron subir los índices de precios de los alimentos al consumidor en muchos países (con la inflación de los alimentos al consumidor alcanzando su punto máximo en abril de 2020).

Este aumento se dio a pesar de que los precios de producción de los productos básicos primarios, incluidos los alimentos y la energía, estaban disminuyendo drásticamente a medida que se interrumpía la demanda de productos alimenticios primarios.