Mercado argentino de cervezas: peligra la IPA por la falta de lúpulo y las marcas invierten para sumar producción
Si bien el mercado argentino de cervezas tiene mucho por crecer, está afrontando ciertas dificultades
La consultora Claves elaboró un "Estudio del mercado argentino de cervezas" y destacó que el 2022 fue un año auspicioso para el sector, tanto en el plano interno, donde se vendieron 4,5% más botellas que en 2021, como en el externo, en donde las exportaciones de cebada y malta alcanzaron récords históricos, impulsando la producción de cerveza en un 4%.
Sin embargo, para seguir creciendo, advierten que el sector debe resolver inconvenientes vinculados con las importaciones de materias primas, los impuestos internos que percibe el producto terminado, que afectan especialmente a los productores artesanales. Cabe señalar que se trata de un mercado altamente concentrado, en donde dos empresas se distribuyen el share de la producción industrial, en tanto que el gremio artesanal se compone principalmente de medianas, pequeñas y hasta microempresas.
En cuanto a las perspectivas para el 2023, la consultora Claves Información Competitiva destaca que, si bien la cerveza es un bien demandado en la sociedad argentina, reviste de importancia evitar que el desabastecimiento o los inconvenientes con la importación de los insumos continúen elevando los precios finales del producto: "Esto podría llegar a afectar especialmente a la categoría de productos premium o bien reducirla cada vez más a un universo de compradores con mayor poder adquisitivo". Cabe destacar que la cerveza ya de por sí tributa impuestos internos que acrecientan su valor en góndola en hasta un 52,4%.
El 2023 inició con dificultades en la importación de lúpulo - que, aunque producido de Río Negro y el Bolsón, cubre apenas el 15% la demanda, por lo que debe ser traído del exterior – afectando especialmente a los pequeños fabricantes que no pueden afrontar los pagos ante la falta de dólares.
Según publicó la Cámara de Cerveceros Artesanales de Argentina, para un 40% de los productores hay faltante total de lúpulo en el mercado. Un porcentaje similar asegura que hay además escasez de malta y de botellas de vidrio. De no resolverse esto, según informó Antares al diario 0223 marplatense, la IPA “podría desaparecer” o bien que los costos de la cadena de producción se trasladen a los precios finales.
Otra cara de la moneda es que, si bien el producto terminado producido en Argentina es valorado en el exterior, solamente un 5% de los fabricantes pequeños exportan por diferentes motivos, como por ejemplo por la incapacidad de ampliar su producción; por dificultades en el sistema de exportación e inconvenientes en la distribución vinculados a la refrigeración y al cuidado de la oxigenación de la cerveza.
Con respecto a la oferta interna, fundamentalmente los productores artesanales debieron virar su producción a botellas y latas. El principal exponente es Bierhaus, cuyas ventas en barriles pasaron a representar de un 98 a un 80%, en tanto que las provenientes de las latas se ubicaron en un 20%, creciendo en un año y medio lo que proyectaban en cinco años. Esto representa un desafío para el gremio artesano, que deberá aprender a competir por el modelo envasado – que llegó para quedarse – con las industriales y semiindustriales como Patagonia y Antares, entre otras.