De chica vivió cómo el clima afecta al campo y desarrolló un producto inédito: acaban de lanzar la primera patente
Hace dos años se asoció a un biotecnólogo para escalar el proyecto que busca aumentar la tolerancia al estrés hídrico de los cultivos
Paz Álvarez (28) nació en una zona rural de Mendoza. Su abuela tenía una finca en Las Paredes, un distrito ubicado en San Rafael, donde producía uvas y frutales. Fue a una escuela rural y sus amigos eran, en su mayoría, hijos de peones. Vivió cómo se trabaja en el campo y los problemas que tenían que atravesar. Esas raíces la llevaron a donde está hoy: en California, Estados Unidos, internacionalizando Zavia Bio, su propia empresa de soluciones biotecnológicas para el agro con un producto único para mitigar los efectos del cambio climático.
Identidad y compromiso: el origen de Zavia Bio
La joven mendocina creció viendo en primera persona cómo el clima puede hacer que pierdas todo: “De grande lo racionalicé y entendí las implicancias que tiene en lo económico. En un día que cae granizo podés quedarte sin el trabajo de todo un año, la falta de agua puede hacer que tengas que vender parte de tu campo para pagar los costos”, contó en entrevista con Agrofy News.
Paz se enorgullece de sus raíces rurales y de dedicar su tiempo y energía en tratar de resolver los problemas que conoció por su abuela: “Pienso por qué hago todo esto y efectivamente es porque es parte de mi identidad”.
La tecnología al servicio de la humanidad
Lo interesante del perfil de Paz es que primero optó por estudiar una carrera humanística, Relaciones Internacionales, porque le interesaba entender los problemas globales como el cambio climático: “Luego me di cuenta que no solo quería analizarlos sino resolverlos, ahí tuve que acudir a la ciencia y la biotecnología”, expresó.
Obtuvo una beca en Singularity University y fue un punto de inflexión en su vida. Su paso por esa experiencia académica le hizo conocer a muchas personas de todo el mundo que están preocupadas en resolver problemáticas como ella: “Aprendí cómo las tecnologías exponenciales son la herramienta para solucionar los grandes desafíos de la humanidad”.
Uno de los aprendizajes que transmite es que no hace falta tener una ONG para contribuir al cambio: “Todo lo contrario, probablemente vas a tener mucho más impacto si podés hacer un negocio rentable que genere empleo y que sea valioso para las personas”, detalló.
Esa visión le abrió mucho la cabeza y hace dos años decidió crear una empresa, Zavia Bio, para solucionar un problema que “no es algo propio de Argentina sino de todas las regiones del mundo” y agregó: “El estado del arte de la ciencia y la tecnología está lo suficientemente avanzado como para poder utilizarlo a favor nuestro”.
Cómo nació Zavia Bio
En esa búsqueda, en 2021 conoció a Enrique Detarsio, rosarino, doctor en Ciencias Biológicas, que se convirtió en su socio, cofundador y líder científico de la empresa: “Ambos hicimos el proceso de company builder de Grid Exponential, del fondo de biotecnología de Argentina. Era pandemia, todo se hacía virtual y decidimos empezar el proyecto sin habernos visto presencialmente”.
Paz destaca que con Enrique fue un “match muy natural” porque comparten la misma visión del sistema agroalimentario: “Ambos estamos muy comprometidos con la idea de demostrar que producir alimentos de forma eficiente y altamente escalable, para nutrir a una población mundial que no para de crecer, no tiene por qué ir en detrimento del cuidado del medio ambiente y los ecosistemas, y de la salud humana”.