Sol Cravello no tomaba cerveza y estudió hasta convertirse en una referente de la bebida en Argentina y la región: llegó a ser jueza del "Mundial" en donde probaron hasta 60 por día

"Hay una magia y un mundo impresionante", destaca María Sol Cravello (40), una verdadera apasionada sobre todo lo que se genera alrededor de la cerveza, un producto que va directo del campo a la mesa a través de la cebada, el lúpulo y hasta el maíz.

Sol Cravello: "Necesito que todos comprendan lo maravilloso de este mundo"

Al repasar la trayectoria de Sol tranquilamente se puede decir que es una de las que más sabe del tema en Argentina, sobre todo si se tiene en cuenta el aspecto sensorial. Pero en sus inicios no tenía mucha relación con esta bebida.

"Pasé de '¿Cómo pueden tomar eso?' a 'Necesito que todos comprendan lo maravilloso de este mundo y encuentren su cerveza favorita. Que prueben, que quieran explorar estilos, que quieran incorporarla en sus comidas, que la saboreen de verdad. Que conozcan el incansable trabajo que hace un Maestro Cervecero (Brew Master) y todos los cuidados que requiere conservarla fresca para su mejor consumo'", destaca en sus redes.

Sol Cravello nació en Capital y es licenciada en tecnología industrial de los alimentos. Mientras estudiaba trabajó en un laboratorio de microbiología clínica y se empezó a interesar mucho en los microorganismos, sobre todo aplicados a los alimentos: "Me llamaba mucho la atención ver cómo una bacteria o una levadura puede cambiar el sabor de algo y hacer un alimento distinto", repasó en diálogo con Agrofy News.

Así fue que ingresó a Cervecería y Maltería Quilmes, en Zárate. Tenía que hacer 90 kilómetros para llegar al trabajo, pero sus ganas fueron más fuertes que la distancia. Su primer responsabilidad fue coordinar el panel sensorial de la cervecería y comenzó a sumar mucho conocimiento sobre el proceso de elaboración y los sabores que se generan.

Todo este conocimiento se combinó con su pasión por comunicar: "Me empezó a pasar que quería contarle a todo el mundo lo que iba aprendiendo, es un mundo muy fascinante y suele ser desconocido". Esto la llevó a tener un nuevo rol dentro de la compañía, líder en elaboración y comercialización de la Argentina.

Pionera en el conocimiento cervecero

En paralelo, comenzó a especializarse como sommelier de cerveza y fue la primera mujer de Latinoamérica en rendir la certificación Ciceron, un curso que nació en Chicago, Estados Unidos, pero que se expandió y tiene validez internacional. Sol ya tiene los dos primeros niveles de esta especialización y brinda los cursos en Argentina para rendirla. Al mismo tiempo, se prepara para superar el examen del tercer nivel (son cuatro en total).

También se capacitó como sommelier en Doemens y se especializó como jueza internacional de competencias de cerveza hasta alcanzar un grado que tienen solo cinco personas en la Argentina: el de National en el BJCP (Beer Judge Certification Program). Esto último luego de muchas horas de estudio y repaso.