En 20 años Argentina perdió más de la mitad de la participación de inversores extranjeros en solicitudes de nuevas variedades de semillas: "Temen invertir"
Un estudio advierte que la falta de modernización en la ley de semillas frena la innovación y amenaza la competitividad del agro argentino

El libro “Innovación en el agro argentino. La política económica de los derechos de propiedad intelectual en semillas” escrito por Andrés Gallo, trata de estudiar el sistema legal de las nuevas semillas en la Argentina.
Gallo, quién es profesor del Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias Empresariales de Rosario de la Universidad Austral, advierte que el país mantiene una ley de semillas de 1973 y un convenio internacional antiguo (UPOV-78), lo que desalienta la inversión en nuevas tecnologías.
Según indica, este sistema se caracteriza por tener una definición muy laxa de los derechos de propiedad, que no se ajusta a los estándares internacionales, y por un sistema de control que no hace cumplir adecuadamente los derechos de propiedad de los obtentores.
El desafío es clave para el sector debido a la necesidad de incrementar la productividad agrícola y contar con tasas de crecimiento dinámicas que permitan a la Argentina mantener o acrecentar su participación en los mercados globales.
