Ratifican una denuncia penal contra el titular del Senasa
Cané será investigado por presuntas irregularidades en el organismo sanitario
La causa fue radicada ante el juzgado federal N° 5, a cargo de Norberto Oyarbide
La controversia en torno de la inhabilitación de 17 frigoríficos para exportar carnes a la Unión Europea (UE) por parte del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) derivó ayer en graves imputaciones contra su presidente, Bernardo Cané, por supuestas irregularidades en el organismo.
El abogado Mariano Varela, que representa a unas 10 empresas perjudicadas, agregó ayer a una denuncia penal que radicó como querellante el 18 del actual en el juzgado federal N° 5, a cargo del magistrado Norberto Oyarbide, información acerca de una presunta cuenta en el Banco de la Suiza Italiana (BSI), en Lugano, Cantón Ticino, Suiza, a la que el funcionario habría transferido aparentemente una suma superior a los 2 millones de dólares.
Consultado por LA NACION acerca de los hechos, Cané negó categóricamente poseer dicha cuenta bancaria en el exterior y calificó de "infundio" la denuncia. "No tiene ninguna entidad ni sustento; no hay conocimiento de que haya alguna denuncia y, si la hubiera, se responderá judicialmente. De todas formas, considero que es un infundio", expresó ayer el presidente del organismo sanitario.
Sin embargo, Varela confirmó a LA NACION que a la ratificación de su presentación inicial sumó ayer un informe en el cual presuntamente se vincularía a Cané con las empresas Madex Pharmaceuthical y Chemolbérica, asentadas en Lugano, que a su vez tendrían alguna relación con dos firmas argentinas, una de ellas dedicada a la fabricación de vacuna antiaftosa.
La denuncia ampliada también incluiría supuestas maniobras ilegales en la certificación de calidad en la habilitación de frigoríficos argentinos interesados en exportar carnes a Chile. Según detalla el agregado presentado por Varela a la demanda penal, un agente del mercado de carnes radicado en Bruselas le habría sugerido a Cané formar parte de una compañía certificadora que contaría con el monopolio del mercado, dado que el Senasa es el encargado de autorizar las operaciones de las empresas.
Aquí, la información ingresa en una zona gris, pues aporta un supuesto intercambio de correos electrónicos entre el presidente del Senasa y el operador en Bélgica en los que Cané, presuntamente, afirmaría haber tomado medidas para limitar las acciones de otras compañías certificadoras de carnes.
La historia sin fin
Y hay más. En la causa que ahora deberá cursar la justicia federal, Cané aparecería supuestamente emparentado con una firma dedicada a crear soluciones en trazabilidad animal, un sistema de identificación del ganado vacuno destinado a la exportación que entrará en vigor por resolución del Senasa en agosto próximo.
El abogado querellante advirtió que todo este tejido, supuestamente ilegal, debe ser investigado por la Justicia, y evitó difundir el origen de la información. El diario La Mañana de Córdoba, de todos modos, publicó ayer una nota sobre la presentación judicial.
La trama de la historia comenzó hace tres semanas cuando el Senasa dejó afuera de la lista de frigoríficos autorizados para exportar carnes a Europa a unas 17 fábricas. Al mismo tiempo, el organismo habilitó a otras 11 plantas nuevas, pero quedaron excluidas 15 que también se habían presentado para lograr la habilitación.
La polémica nace porque estas empresas no podrán participar de la próxima adjudicación de la cuota Hilton, un negocio que ronda los 200 millones de dólares anuales y que administra la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos (Sagpya), conforme al listado del Senasa.
Esto generó la reacción política de altos funcionarios de las provincias de Córdoba y Buenos Aires, que so