Productores “celebran” primer año bajo el agua

Agricultores inundados de Nueve de Julio piensan llamar la atención del gobierno bonaerense botando una torta gigante de cumpleaños en las lagunas que ocupan lo que antes eran campos en producción

16deAgostode2003a las08:48

Para los productores del noroeste del partido bonaerense de Nueve de Julio, el canal Mercante pasó a ser parte del problema de las inundaciones, en lugar de su solución. Eduardo Gallo Llorente, productor de ese partido, señala que la rotura del talud del canal hace que el agua que transporta se vuelque hacia los campos de la zona, formando un sistema de lagunas encadenadas.

“Son 25.000 hectáreas afectadas de campos agrícola ganaderos, en el Cuartel V del partido, que desde hace un año se encuentran inutilizadas por el agua que trae el Mercante”, comentó este productor a Infochacra. “La realización de obras, tanto legales como clandestinas, aguas arriba hizo que el canal ampliara el área que desagota, de manera que de los 40 metros cúbicos por segundo que transportaba pasó a alrededor de 80”, comentó.

En septiembre del año pasado, el talud del canal colapsó a la altura del Bajo de la Yesca, diez kilómetros al oeste de la localidad de La Niña, afectando a unos 50 productores, en algunos casos cortando el acceso al campo. Gallo Llorente es uno de ellos; su campo está inutilizado en 75 por ciento y encima, al no tener acceso a la propiedad, no puede aprovechar el 25 por ciento restante que está sin agua.

En definitiva, se trata de tres brechas de unos 50 metros, que no implicaría un gasto descomunal de parte del gobierno provincial. Sin embargo, el hecho de que el Mercante haga agua por todos lados -nunca más real la metáfora- estaría llevando a las autoridades bonaerenses a no realizar ninguna de las reparaciones.

En diciembre del año pasado, en una reunión que mantuvo con los dirigentes de Carbap, el ministro de Infraestructura de Buenos Aires, Raúl Rivara, comentó que restaurar las paredes del Mercante en el partido de Nueve de Julio demandaban $10 millones, y que el total para todo el canal se elevaba a $60 millones.

“En septiembre de 2002, Rivara vino a Nueve de Julio y nos prometió una solución, pero un año después todo sigue igual”, puntualizó por su parte Alberto Gallo Llorente, hermano de Eduardo y presidente de la Sociedad Rural de esa localidad. También apuntó a algunas falencias del plan que el gobernador Solá anunciara recientemente en el Hotel Intercontinental de Buenos Aires, a saber: a) que las dragas adquiridas por el gobierno provincial son de escasa capacidad de trabajo y b) que la Cuenca del Salado se amplió de 90.000 a 140.000 km2 debido a obras clandestinas y que ahora es un problema que traspasa los límites de la provincia de Buenos Aires. “Son sólo anuncios de campaña”, opinó el dirigente rural respecto de las declaraciones gubernamentales.

Lo cierto es que los productores de ese partido piensan recurrir al humor para llamar la atención de los dirigentes políticos provinciales.

Cuando se cumpla un año de la rotura del canal echarán a la laguna una torta de cumpleaños gigante, con una vela encendida, simbolizando los lamentables primeros doce meses con los campos inundados.