Llamas, una alternativa extensiva
Desde hace 24 años Eduardo Frank trabaja con camélidos en distintos lugares del país, a partir de un proyecto de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Católica de Córdoba. Se trata del “Programa de sustentabilidad productiva de pequeños rumiantes en áreas desfavorecidas” (Supprad).
pmartinez@lavozdelinterior.com.ar
Desde hace 24 años Eduardo Frank trabaja con camélidos en distintos lugares del país, a partir de un proyecto de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Católica de Córdoba. Se trata del “Programa de sustentabilidad productiva de pequeños rumiantes en áreas desfavorecidas” (Supprad).
Las actividades se concentran en la Puna y en Río Negro, pero ante el creciente interés por comenzar con este tipo de producción en el centro del país se resolvió lanzar un foro para reunir a los productores. Quedó conformado el mes último, en un curso que congregó a medio centenar de interesados (la mitad ya poseen ejemplares).
La labor de la universidad comprende a media docena de cooperativas en en el sur y el norte del país, que reúnen entre 45 mil y 50 mil llamas.
La producción de llama en la Puna es casi exclusiva. En cambio, en el resto del país está comenzando a difundirse como una forma de diversificar la actividad agropecuaria.