La Argentina, líder en exportación de harinas proteicas
La producción anual llegó a 27,8 millones de toneladas en el 2012 y aportó divisas por más del 12% del total de ventas al exterior.

La Argentina es el primer exportador mundial de harinas proteicas, un producto vital para la alimentación global pero casi desconocido en el país, donde la producción anual llegó a 27,8 millones de toneladas en el 2012 y aportó divisas por más del 12% del total de ventas al exterior.
El mercado mundial sigue creciendo y la Argentina tendrá un papel estratégico, aunque la industria se enfrenta a la creciente importación china de soja sin procesar y tiene impedido el acceso al ingreso temporario de soja de países vecinos, consignó un informe del sector harinero.
Según prevé la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en 2014 la producción mundial de carnes será de casi 300 millones de toneladas, tras crecer casi un 20% en nueve años, desde 2005, y aproximadamente un 50% en 18 años, desde 1996.
Usualmente, la recuperación económica mundial o el crecimiento de países que incorporan cada vez más habitantes a un mejor nivel económico, que se refleja también en una alimentación más diversificada, provocan que la generación de carne y su incremento ocasione una simétrica mayor demanda de harinas proteicas para alimentar al mundo.
"El importante aumento en la producción y en el consumo mundial de carnes ha impulsado un fuerte y sostenido crecimiento en la utilización de harinas proteicas," concluyó un reciente informe de la Dirección de Mercados Agrícolas del Ministerio de Agricultura.
La harina de soja es el producto resultante después de la extracción del aceite con disolventes y pueden presentar la forma de harina fina o gruesa, o agrumada en terrones pequeños o grandes.