Advierten sobre el impacto de los costos en los resultados económicos
En un comunicado, CREA destacó que la soja se recuperó en gran medida luego de un mal comienzo, pero dejará poco saldo para encarar el nuevo ciclo.
La campaña de granos gruesos 2013/14 se encuentra en un estado avanzado y permite avizorar algunas tendencias firmes. Las sojas de primera y de segunda se recuperaron en gran medida luego de un mal comienzo y podrán alcanzar rindes cercanos a los planificados en todas las regiones productivas, excepto en el sudoeste bonaerense. En cambio, los maíces tempranos darán lugar a rendimientos menores a los planificados en todas las regiones, mientras que en los tardíos se da la situación contraria, con perspectivas de rendimientos muy satisfactorios.
La anterior es una de las principales conclusiones que se obtuvieron en la Encuesta de Percepciones y Expectativas, realizada recientemente entre integrantes de los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) en distintas provincias argentinas.
No obstante, estos buenos resultados productivos que se esperan si el clima no compromete la evolución de los cultivos tardíos, no garantizan un resultado económico satisfactorio para los productores por los aumentos de precios de los insumos y por costos de financiación en línea con la inflación. En ese sentido, cabe aclarar que la producción comprometida para cubrir los costos en los dos meses siguientes a la cosecha alcanza al 57% en girasol, al 40% en soja y 28% del maíz.
Resultados declinantes
El 58% de los que contestaron la encuesta indicó que sufrió un deterioro del resultado económico en las empresas en el último año. A partir de ese escenario, la principal medida adoptada fue la postergación del crecimiento, aunque también se concretaron reducciones de retiros y liquidaciones de capital.
Por otro lado, un porcentaje mayoritario de los que respondieron la encuesta estima que, para la campaña 2014/15, se requerirá un aumento de capital operativo valuado en dólares del 11% para desarrollar actividades agrícolas, del 10% para ganadería de carne y del 14% para tambo respecto del ciclo previo.