Tamberos no tuvieron novedades sobre los subsidios de junio
Desesperación entre la producción y falta de cumplimiento de la mínima función pública para mejorar la condición sectorial alientan más reclamos.
Los subsidios de junio debieron pagarse el miércoles y los tamberos no tuvieron novedades en la semana.
Sin corresponder al idioma castellano, a la palabra default los argentinos la tenemos muy bien ubicada en su significado, entendiéndola como una cesación de pagos y la consecuente subyacencia de una deuda.
Si bien este es el Gobierno heroico de los discursos sobre los pagos de deudas, la fijación pareciera estar más hacia afuera que respecto a los pendientes a nivel interno.
Fue en marzo que con las lluvias y el oportunismo de los anuncios pre campaña, se decidió sacar a algunos funcionarios del Ministerio de Agricultura a pasear por algunos sectores productivos, lugares donde nunca se vio al titular de la cartera, para que hagan anuncios de aportes. Las emergencias aún no se cobraron, los caminos rurales aún no se arreglaron, por lo menos en el departamento donde están sin ejecutar los presupuestos prometidos, siendo un claro ejemplo de eso el de Rafaela (aprobado el aporte recientemente por el Concejo Municipal).
Respecto a los tamberos, fue justo hace siete meses que se prometió un primer tramo de subsidios, restringidos a los productores de hasta 2.900 litros por mes, entregando 30 centavos, hecho negado unos meses atrás, pero entendido como un gesto pro voto, luego de una salida climáticamente compleja del verano. Eso se pagó, tarde, pero llegó a los pocos incluidos y a los más avezados que lograron poder completar todos los requisitos cibernéticos.
Resulta que con un desplomado esquema de precios a nivel internacional, la constante baja interna e incluso los altercados frente a las industrias de julio, que obligaron a diálogos forzosos pero sin resultados, con la disolución de la mesa de debate por el precio y una constante falta de comprensión sobre las variables que hacen al particular mercado lechero argentino.
Funcionarios ocultos, tamberos desauciados e industriales sobrestockeados hacen a un marco particular de situación, más aún después del anuncio que del séptimo mes del año ilusionaba mínimamente a algunos, pero que demandaría una confirmación de un mes más, con la intervención en cadena nacional de la Presidente de la Nación, con intensos errores de concepto sobre las formas de pago y la intervención industrial en el tema.