Precios atrasados y adaptación a la pandemia: cuál es la actualidad de las pymes lácteas
Apuestan a una mejora en los plazos de pago, más exportaciones e incluso la recuperación del mercado interno la lechería en un año irregular.
Allá por marzo todo era confusión e improvisación, porque a pesar del tiempo que tardó la pandemia en llegar, nada se había diagramado. De lo que no había dudas era que la industria alimenticia y el campo no iban a detenerse, con lo que se logró evitar el desabastecimiento que en otros lugares del mundo acompañó al desembarco del coronavirus. La capacidad de adaptación argentina fue clave para eludir consecuencias negativas.
De aquel comportamiento errático del sector lechero hasta ahora las condiciones cambiaron y esto es lo que Agrofy News repasó con Pablo Villano, el presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel).
"Cuando empezó está pandemia, no sabíamos si íbamos a poder vender algo, adentro o afuera. Si a ese momento lo comparamos con lo que terminó sucediendo la situación es positiva, eso significa que pudimos estar en actividad, llevar los lácteos a la mesa de los argentinos y además, que los mercados externos nos permitieron tener participación en las ventas".
Aportando Apymel un diez por ciento del total vendido al exterior, sin hablar de precios porque siguen afectados por la condición global, los compromisos se cumplieron con Brasil, Chile, Perú, Colombia, e incluso se llegó a vender en Rusia, aunque ahora se frenó ese destino y se estima que desde el mes próximo se reactivarán los negocios con Argelia. “El mercado externo en cuanto a leche, quesos y suero se mantuvo en su mejor y mucho mejor de lo que los pronósticos lo decían”.
Enfocando el análisis en el mercado interno, con una mejor producción de materia prima gracias a las buenas reservas que había dejado el clima de la campaña anterior y que quizá no se pueda repetir el año próximo por la sequía, pymes lácteas destacan que los indicadores de la producción primaria se vieron en alza.
Las industrias de todos los tamaños adaptaron sus equipos de trabajo para no dejar de funcionar, sin embargo, la afección del coronavirus se mostró en baja proporción, pero en igual comportamiento que en lo que sucede a nivel nacional. Primero fue en Capital Federal y el Gran Buenos Aires dónde las industrias y depósito reportaron casos y ahora se presentan situaciones similares en el interior del país, con baja incidencia por el cumplimiento de los protocolos.
“Se empieza a dar un problema entre municipios o pueblos donde hay pymes lácteas, porque en muchos casos de forma repentina se cierra la circulación entre localidades y eso puede afectar durante muchos días a las empresas”, explica Villano.