El ave fénix del campo: con nuevos nombres, Vassalli se encamina a cerrar el año de su resurrección

El 2020 no es el año del ave fénix (de hecho, no existe tal cosa), pero bien podría servir para hablar sobre cómo se viven estos meses en la emblemática fábrica de cosechadoras Vassalli. Es que tras atravesar un largo período de crisis, hoy la firma goza de un presente estable y un horizonte prometedor. Luego del ingreso de un grupo inversor a finales de 2019, la planta aumentó un 25% su personal y un 40% su red de concesionarios, en el marco de una coyuntura donde soplan vientos a favor de la maquinaria agrícola.

Es cierto: todo el complejo metalmecánico ligado al agro pasa por un buen momento. Sin embargo, el caso de la firma radicada en Firmat cobra singular importancia, por una historia reciente de marchas y contramarchas, que incluyó la toma de las instalaciones durante 36 días y una convocatoria de acreedores (aún en marcha) por 547 millones de pesos.

En la pequeña localidad del sur santafesino festejan que este será el primer año en varios que se abonan sueldo, aguinaldo y vacaciones en tiempo y forma. Así vienen siendo los últimos meses, donde no solo celebran los actuales 350 operarios (hace un año eran 280) sino también el resto de la región: cada 30 días se vuelcan allí 18 millones de pesos en concepto de salarios.