Fuerte suba para el ternero, que promedia los $265 el kilo: los dos caminos que podrían seguir los productores
En ambos casos es muy factible esperar una menor oferta de carne hacia fin de año
Foto: Rosgan
El informe semanal de Rosgan repasa que, ante una zafra limitada como la lograda este año, era esperable que la demanda comenzara a presionar sobre el valor de la invernada a medida que nos alejamos del periodo de mayor oferta estacional. Pero sin dudas esta escasez de oferta no es factor suficiente para explicar plenamente la fuerte suba de valores que están experimentando los terneros, en especial en el último mes.
En lo que va de octubre, la referencia para el ternero de 180 a 200 kg promedia los $265 el kilo. Comparado con los valores promedio registrados durante las primeras dos semanas de septiembre ($241 el kilo) se evidencia una suba de 10 puntos en el último mes. María Julia Aiassa, analista de Rosgan, destaca que la última corrección de esta magnitud la registró en febrero -previo al inicio de zafra- y a partir de allí, los valores han estado ajustando a razón de un 1% a 2% mensual. Similar comportamiento ha estado mostrando el precio del gordo desde entonces, aunque en octubre su trayectoria ya se ha desacoplado completamente ante la imposibilidad de acompañar dicha suba.
Tomando el mismo corte a la primera quincena de cada mes, el precio del novillito liviano en Liniers promediaba los $196 el kilo, marcando incluso una ligera baja respecto de los $197 promedio de la primera quincena de septiembre: "Esta estabilidad claramente se corresponde con la estabilidad que se sigue observando en el precio de la carne en el mostrador", explica Aiassa.
En efecto, el último informe del IPCVA marcada un retroceso del 0,2% del precio de la carne vacuna a inicios de mes, comparado con el relevamiento de septiembre. En este sentido, por lo anunciado desde la Secretaría de Comercio, los precios de los alimentos se intentarán mantener estabilizados hasta fin de año, algo que indefectiblemente pondrá techo al precio de la carne y, por ende, a la recuperación del gordo.
Bajo este marco, los valores actuales plantean una relación ternerogordo en torno a 1,33. Si bien estacionalmente este es un período en el que esta relación de compra tiende a encarecerse, luego ajusta con la corrección del gordo hacia fin de año. El año pasado, para este mismo período, el valor del ternero se ubicaba 35% más caro que el novillito. Sin embargo, a diciembre esta relación ya había corregido a 1,21, tras una corrección del gordo de un 44% vs. un ternero que acompañó con un ajuste inferior al 30%.