¿Carne Marolio? La apuesta del dueño del imperio alimenticio que nació en un almacén de Laferrere
Desde la provincia en la que industrializan tomates, la empresa familiar llegó a la producción primaria: tienen un feedlot de 4000 cabezas y quieren llegar a las 6000 el próximo año
“Nuestra historia productiva arranca en el núcleo de la familia. Al principio, íbamos con mi papá y mis hermanos a buscar precios a un mayorista para revender en nuestro almacén. Un día compramos una marca, luego adquirimos el mayorista y, un tiempo después, decidimos producir el alimento”, cuenta Víctor Fera, dueño de Marolio, Molto y Maxiconsumo, el gigante de la industria alimenticia que ya sueña con un nuevo reto: meterse de lleno en la industria de la carne.
Los Fera, una familia inmigrante italiana, empezaron trabajando en su propio almacén en Laferrere. En 1985 compraron una marca que ya existía en el mercado: Marolio. Poco tiempo después crearon Maxiconsumo y se dedicaron a la venta mayorista, lo que los obligó a pensar en el desarrollo que hoy los encuentra con cuatro plantas industriales de tomate, fideos, vinagres y arroz en distintos puntos del país.
“En el grupo Marolio, Molto y Maxiconsumo somos 3.500 personas trabajando. Todos somos importantes, desde el que hace un pozo con una pala hasta el que repone las góndolas. Me siento muy orgulloso de mi familia, de los socios y del personal que trabaja en la empresa”, relata el empresario que en dos generaciones pasó de tener un almacén a producir alimentos y llevarlos hasta el último eslabón de la cadena.
“Mi slogan es la frase que una vez leí en una tarjeta de un desconocido: honestidad, trabajo y esfuerzo, eso que algunos llaman suerte”, destaca.