El INTA certificó que un kilo vivo de bovino captura carbono: presentaron la primera declaración ambiental
A través del eco-etiquetado se corroboró los 10 impactos ambientales que genera la hacienda; el trabajo se realizó en Entre Ríos
La discusión sobre la huella de carbono y el impacto de la ganadería en el ambiente parece comenzar a saldarse. El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) realizaron un estudio para analizar los valores que genera un bovino en pie.
De esta primera presentación se certificó que un kilo vivo captura carbono. El trabajo se realizó en un campo de Entre Ríos con un animal de la raza Angus.
El INTA explicó que el eco-etiquetado contiene 10 impactos ambientales, desde el origen de todos los factores de producción hasta la salida del animal en la tranquera. “Se trata de uno de los sistemas de certificación más exigentes del mundo que permitirá respaldar la sostenibilidad y prestigio de la carne argentina frente a las exigencias del mercado internacional”, señaló la entidad.