Atilra: un conflicto interno que amenaza con impactar sobre toda la cadena láctea

Un sector del sindicato lechero le reclama a su dirigencia que se activen los reclamos activos como se había prometido, utilizando a Sancor como excusa de conflicto

Atilra: un conflicto interno que amenaza con impactar sobre toda la cadena láctea
10deSeptiembrede2021a las08:52

Esta semana se conoció un nuevo comunicado que lleva el sello de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra), pero que sigue dejando en evidencia las diferencias internas.

En un momento marcado por el peso de las elecciones primarias, los sindicatos aportan un silencio más marcado que nunca para no alterar los ánimos y no profundizar tendencias. Sin embargo, el malestar interno de Atilra trasciende ese acuerdo tácito.

En Agrofy News se relevó la situación gremial, pero también que en Sancor, que llegó a ser la principal cooperativa de la Argentina, no ha habido novedades significativas que motiven un reclamo activo del gremio, ya que se siguen pagando los salarios en el formato acordado, también los aguinaldos y a pesar de los pronósticos de muchos, se sigue creciendo en la cantidad de litros procesados por día: más de 650 mil litros en cada jornada, cifra que el propio comunicado reconoce, con una calidad que nunca se deterioró a pesar de los diferentes momentos atravesados.

Héctor Ponce es reconocido en el texto, por sus diversas gestiones, sin embargo es él quien debe calmar este ánimo revuelto que lo empuja a generar un conflicto donde no lo hay, simplemente para mostrar poder y peso sindical.

Sigue siendo la seccional Capital Federal de Atilra la que promueve esta actitud, la que bloqueó hace dos semanas el Centro de Distribución de SanCor sobre Panamericana, sin apoyo presencial o virtual de otros segmentos del gremio.

El documento, que argumenta tener más de mil firmas de apoyo, no hace más que complicar el camino a la actualización de la paritaria que se debería dar en la primera semana de octubre y empuja a toda la fuerza laboral lechera a arriesgar el presentismo para reclamar con bloqueos. Además de toda la mala imagen que eso significa.

El pedido de conflicto se basa en personal que en su momento no aceptó el retiro voluntario, que creyó en promesas de mejores arreglos para esa salida que no aceptó el propio Sindicato desde sus referentes principales y no menciona que muchos de esos trabajadores fueron trasladados a las empresas que comparon plantas o negocios que fueron desprendiéndose de la Cooperativa.