Veterinaria y jinete: la campeona que se convirtió en referente por una dura historia de vida
Trabaja en la pyme láctea familiar y dedicó toda su vida a los caballos
Rocío Canut tiene 37 años y es una de las mujeres que logró destacarse en un rubro históricamente dominado por hombres. Nació en Rosario, es médica veterinaria y su familia es dueña de Canut Hnos, una fábrica de quesos ubicada en Roldán y de un tambo que actualmente produce 7000 litros diarios.
“Trabajo en la pyme y a su vez tenemos una pequeña cabaña de caballos criollos de hace más de 30 años”, contó Rocío en entrevista con Agrofy News, quien reparte su tiempo con su otra pasión: la equitación.
Rocio Canut: una vida dedicada a la pyme láctea
Con el lema de “calidad más que cantidad”, Canut Hnos tiene 30 empleados que realizan tareas de elaboración y comercialización de quesos barra, mozzarella, cremoso, sardo, magro, provolone, entre una amplia variedad de productos. Se trabajan unos 50 mil litros diarios y se comercializan en centros de distribución a nivel nacional.
“En la fábrica me dedico a lo que es calidad de quesos, leches, ingreso de materia prima y gestión de personal”, explicó Rocío y contó que la situación en el tambo es más complicada pero trabajando codo a codo, este último tiempo crecieron mucho: “Pasamos de 3 mil litros diarios a 7 mil litros y tenemos 230 vacas en ordeño”.
Sus caballos y un ejemplo de superación
Además de su profesión como veterinaria, Rocío fue una de las primeras mujeres en dedicarse a la competencia equina. “Empecé a los 8 años. En ese momento éramos muy pocas. Hoy en día hay más, pero yo soy una de las pocas que hago todas las disciplinas a la vez”, explicó.
Cuando tenía 34 años, su vida dio un giro a raíz de una enfermedad: “Un día que me fui a bañar descubrí un bulto en el pecho y resultó ser un carcinoma bastante grande. Yo quería alguien que me dijera que durante toda la quimioterapia y durante todas las cirugías podía hacer una vida normal y no encontraba a nadie de ejemplo. Me propuse ser esa persona. Seguí andando a caballo, seguí entrenando, seguí compitiendo, seguí yendo a trabajar”, relató.
Llegó la sorpresa en marzo de 2019 cuando se consagró Campeona Nacional de la final de Corral de Aparte B en Jesús María: “Eran 17 hombres, todos profesionales y yo salí primera en medio de la tercera quimioterapia, la más brava. Le mentí a los médicos porque si sabían no me iban a dejar ir. Tuve que correr además la final de Rienda en Palermo con otra yegua, así que competí con las dos yeguas a la par y terminé quedando tercera en el campeonato nacional”.