La experiencia de dos productores peruanos en la lechería argentina: qué les sorprende y cómo se produce en Perú

Ganaron una pasantía en una de las mejores cabañas Holando Argentino y vivieron el mejor evento lechero trabajando desde adentro

La experiencia de dos productores peruanos en la lechería argentina: qué les sorprende y cómo se produce en Perú
17deOctubrede2022a las09:51

Quizás deberíamos mirar a la lechería argentina con los mejores ojos, alejándonos de los desatinos políticos de décadas y de la sequía que se empieza a profundizar por tercer año consecutivo. Sabiendo que los animales pastan en los mejores suelos posibles, que tienen una producción excepcional, es en el corazón de la cuenca lechera donde todo esto parece natural, pero tiene mucha influencia del empeño del hombre en la tarea productiva.

Producir leche no es solamente la acción de una vaca comiendo alfalfa, sino que tiene que ver con manejos integrales, con el vínculo entre las personas y los animales, y también con la genética y sus secretos.

En la zona de Rafaela se concentran las mejores cabañas de la raza Holando Argentino y es donde mejor se puede aprender todo esto, lo cual está demostrado por los profesionales que salen al mundo y ponen en práctica todas esas estratégias.

En el marco de la 115° ExpoRural de Rafaela y la Región, una de las muestras con más historia del país, pero sin dudas la más importante para la lechería, tuvo lugar una pista que logró impactar al jurado canadiense Eric Hétu, que llegó por gestión de la Asociación de Criadores de Holando Argentino.

La cabaña La Luisa se quedó con el Gran Campeón Hembra, con Bangkok y la segunda más linda en Puros de Pedigree, Carolita. Fue la familia Miretti quien este año tuvo a dos pasantes de Perú trabajando en la muestra de Rafaela y también unos días en sus instalaciones de la localidad de Ataliva.

La experiencia de dos peruanos en la lechería argentina

Roger Paucar Cahuana y Fidel Ahumada Quispe, son oriundos de los distritos Ayaviri y Santa Rosa, del Distrito de Puno al sur de Perú.

“Trabajo en dos establos lecheros privados y también tengo lo que es mío, que son 15 animales entre terneros y vacas, de Pardo Suizo”, sintetiza Fidel, mientras que Roger tiene 60 ejemplares de la misma raza y trabaja en un tambo donde hay unos 500 animales, siendo una de las empresas más grandes de Puno.

“Allá en Perú trabajamos a campo libre, no estabulado como acá. En cuanto a la leche, la mayoría la procesa en pequeñas empresas, por lo general, para producir yogurt, queso, leche fluída”, comienzan contando sobre un negocio que es más reducido que en Argentina, no sólo por el rodeo, por las diferencias de manejo, sino que según la FAO el consumo per cápita está actualmente en los 81 litros por persona al año.

Según ellos, el pago por litro es bajo, pero representa unos 0,50 centavos de dólar en promedio para quienes venden la materia prima. En otros casos, quienes también elaboran productos tienen números diferenciales, llegando al consumo como producto lácteo se hace una estimación de un valor de 1,50 dólares por litro. En cuanto a los quesos, los valores son elevados, ya que están entre los ocho y diez dólares por kilo, que se destina “para la gente que se da su trato, con mayor poder adquisitivo”, lo que en nuestro país se podría comparar con los productos de mayor valor en las heladeras para el consumo.

“Las personas consumen muchos lácteos, sobre todo los de menor valor, compran los quesos más económicos”, añaden.